Artículo del Amigo, lector y colaborador, Alberto Moroy
El Cerro San Antonio...no está en Piriápolis
Inesperado avistaje en el verdadero
Cerro San Antonio
Inesperado avistaje en el verdadero Cerro San Antonio
¡Se pasó Moroy! Al Cerro San Antonio nos lo sacó de Piriápolis
y lo trasladó 28 kilómetros.
No teman, nuestro corresponsal no se volvió loco sino que
puso las cosas en su lugar, pues el de Piriápolis no se llama San Antonio y el
verdadero, a 28 kilómetros de distancia, tenía en su cima una construcción que
pide a gritos que alguien la restaure. Los hallazgos imprevistos de Alberto
Moroy nos ponen en contacto con Guardias
del Monte, Vichaderos, Mangrullos o como los llamara la gente en cada época.
Dicen que para defenderse de los indios, quizás de los portugueses, para ver
venir de lejos a los piratas y seguramente también para acorralar y vigilar al
ganado.
Con mucho menos que esto y un poco de fantasía, en otro país
te montan un recorrido histórico y unos senderos de trekking que ni te cuento.
(N.R. coincido totalmente)